Escapismo

Ayer vi media Amelie, mi pelicula levantadora de animo favorita. No la termine porque sus propiedades terapeuticas no funcionan cuando en el fondo estas escuchando a Fulano y Sutana peleandose como toda la vida. Si a eso le agregamos una silla pateada y un plato quebrado (baratito de Walmart, no hay pex), hasta Amelie se va mejor a dormir.

No pude evitar notar lo curioso que es observarnos a nosotros los humanos y ver las diferentes reacciones y actitudes detras de las que nos escondemos cuando algo no anda bien, o simplemente no tenemos ganas de lidiar con el mundo exterior. Amelie hacia "patitos" con piedras en charcos (Asi les decia mi papa. Disculpen si mi cultura Zaratense les parece extranjera.) El papa del verdulero les hacia hoyos a las hojas de laurel de su esposa con una perforadora. Patrick se bloquea y se sienta en silencio a ver el suelo; o se pone a trabajar sin descanso en al compu, obviamente. Mi madre limpia. Nohemi duerme. De hecho, las tres hermanitas dormimos... que mejor evasion que un coma inducido? Para eso esta el Nyquill. Mi papa ve la tele. Lydia habla y canta para si misma.

Yo tenggo varios metodos. Siempre he sido una Maestra del Escapismo, como Houdini. Antes de los 4 años, me escondia con mi chupon, una almohadita y mis pensamientos (sabra Dios que piensa una cuando se tiene 2 años) detras de los sillones o abajo de las mesitas, esncondida bajo el mantel. Mi mama estuvo a punto de llamar a la chota varias veces despues de pasar horas buscandome en una casa de 4 cuartos. Luego salia yo tan campante cuando me daba hambre, supongo. A los 4 aprendi a leer, y de ahi pa'l real el mundo se tuvo que olvidar de mi. Chupon, almohada y cualquier cosa que tuviera letritas se convertian en un paraiso lejos de todo... atras de un sillon. (Ya se que se estan preguntando... deje el chupon a los 5 años.Me tuvieron ue mandar a Oceanica por unas semanas).

Los ultimos dias no han sido hormonalmente faciles, y me entro el panico al darme cuenta de que no hay sillones lo suficientemente grandes para esconderme aqui. Los libros me siguen soportando, pero me veria estupida con un chupon y una almohadita haciendome cosquillitas en la oreja. Afortunadamente, las cobijas siguen siendo escudo infalible contra monstruos nocturnos, espiritus chocarreros y el sol, reganandote porque no es hora de dormir. Las cobijas protegen de todo. Aun asi, sigo en la busqueda de un escondite perfecto. Esto de casarse le voltea la vida a una patas pa'rriba...

Ustedes como se evaden?